¿Cómo evitar los poros dilatados?
Los poros de nuestro rostro son orificios por donde el folículo piloso, el sudor y el sebo pueden salir y depositarse sobre la superficie de la piel. No representan ningún tipo de riesgo para la salud. Sin embargo, cuando los poros se agrandan y resultan muy visibles, hay quienes los consideran poco estéticos, ya que se encuentran principalmente en la sección media de la cara. Por tanto, se suele tomar medidas cosméticas y dermatológicas para mejorar la apariencia y así poder lucir una piel más tersa y homogénea.
La Dra. Claudia Moreno, dermatóloga de Clínica Indisa y de Santiago Medical Institute, explica que el tamaño del poro está determinado genéticamente y tiene relación con el grosor de la piel. “Es decir, la pieles más delgadas pueden tener poros más finos; en cambio, las pieles más gruesas y con glándulas sebáceas de mayor tamaño o de tipo más grasosa, pueden generar una piel de poros dilatados”, señala.
Principales causas por la que se dilatan los poros:
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Exposición a los rayos ultra violeta sin filtro solar durante largos periodos de tiempo.
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Hiperplasia de glándulas sebáceas, que es el agrandamiento benigno de las glándulas sebáceas.
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Rinofima: es el engrosamiento de la piel en la nariz.
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Rosácea: patología común de la piel que produce enrojecimiento y vasos sanguíneos visibles en la cara.
La dilatación de los poros es considerada un tema estético más que una enfermedad, por lo que no requiere un tratamiento médico específico. Sin embargo, es aconsejable controlarlos para dar un aspecto de piel más liso y terso. Podemos considerar que existen otros factores que influyen en el contacto de nuestra piel como la contaminación, smog, humo de cigarrillo y exceso de sebo, entre otros, que tienden a obstruir los poros y facilitar la formación de los llamados puntos negros o comedones.
Consejos para reducir poros dilatados
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Mantén una rutina diaria de cuidado facial, que considere limpieza e hidratación según tu tipo de piel. Los geles limpiadores, por ejemplo, controlan el brillo y el sebo y evitan que se cierren los poros para que no se generen puntos negros.
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Aplica cremas o sérum con retinoides. Favorece la renovación celular y su estructura permite llegar a las capas más profundas de la piel.
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Usa productos con ácido glicólico. Se trata de microexfoliantes que aceleran la renovación de la piel y favorece el grosor de la capa más superficial.
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No olvides usar a diario protectores solares factor 50 o superior.
La Dra. Moreno señala que, además, hay técnicas de láser de tipo luz pulsada intensa que estimula la formación de colágeno por los fibroblastos propios y también algunos láser ablativos que permiten la renovación de la capa superficial de la piel, mejorando su textura y suavidad y atenuando en parte los poros dilatados.
Ya sabes, aunque los poros dilatados no representan ningún tipo de riesgo para la salud, es aconsejable controlarlos, para prevenir la aparición de puntos negros o comedones.
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