Pero también puede ser una manifestación de algunas enfermedades, principalmente resistencia a la insulina y diabetes mellitus tipo 2, además de sobrepeso y obesidad. Con menor frecuencia, las axilas u otras zonas del cuerpo oscurecidas y engrosadas pueden ser síntoma de algún cáncer. “Cuando uno ve pacientes que tienen un oscurecimiento y un engrosamiento de la piel no solo en las axilas, sino que también en otras zonas del cuerpo, es importante realizar un estudio para descartar alguna patología sistémica, en este caso particular diabetes u otras”, advierte el Dr. Fuenzalida.

Cautela con los tratamientos

Si bien la dermatología dispone de tratamientos para despigmentar zonas de la piel oscurecida, el especialista llama a la cautela, porque se podría generar un efecto contrario. “Lo más importante es saber que es bien complejo decolorar las axilas. Primero, porque es una piel muy delgada. Existen diferentes productos que los dermatólogos recomendamos para despigmentar, pero hay que ir con cuidado porque estos productos podrían irritar; y si irritan, finalmente van a terminar produciendo una mayor pigmentación. Recordemos que todo lo que se irrita termina con hiperpigmentación”, asegura.

Para evitar la irritación en la piel de las axilas –y que produce su oscurecimiento–, también puede ser útil considerar las siguientes medidas de prevención:

• Utiliza desodorantes que no contengan perfume ni alcohol en su formulación, porque ambos componentes pueden ser irritantes.
• Usa ropa holgada y de telas de fibras naturales como el algodón, porque el roce de telas sintéticas también puede ser un agente de irritación.
• Para las mujeres que depilan sus axilas, utilizar los métodos menos agresivos e irritantes, como la depilación láser.