Tal vez no lo sabías hasta que empezaste a usar mascarillas sanitarias, lo que te obligó a sentir tu propio aliento y fue ahí cuando te diste cuenta de que no era agradable. Si es así, eres parte del 25% aproximadamente de la población que presenta halitosis, cuya característica principal es el mal olor bucal crónico.
Según la Dra. Sonia Rivera, directora de la Escuela de Graduados de la Facultad de Odontología de la Universidad Finis Terrae, la halitosis es una condición que, normalmente, el afectado no percibe y que generalmente no es conversado entre los cercanos, ya sea por pudor o por temor a herir a quien la padece.
“La halitosis es un problema biopsicosocial que afecta la autoestima del paciente y su relación con el entorno social”, enfatiza la Dra. Sonia Rivera, quien agrega que el uso de la mascarilla ha permitido que la persona que padece este problema haya podido percatarse de su existencia.
Causas del mal aliento
Cómo prevenir la halitosis
¿Cómo se soluciona?
“Lo primero que se debe hacer para tratar la halitosis, es realizar un completo examen bucal para diagnosticar los problemas que pudieran existir. Luego, tratar las patologías detectadas y adscribirse a un plan de mantenimiento de la salud bucal”, señala la profesional de la Sociedad de Periodoncia de Chile.
La especialista afirma que el cirujano dentista puede enseñar la técnica de higiene más adecuada para controlar los microorganismos patógenos de la cavidad bucal, lo que puede incluir además de un correcto cepillado, otros elementos para la limpieza interdental, tales como: seda dental, cepillos interproximales, enjuagatorios, entre otros.
“Para una correcta higiene bucal es necesario aplicar una técnica de cepillado que asegure la remoción de la película microbiana que se deposita sobre los dientes y que conocemos como placa bacteriana, además de los restos de alimentos en los espacios interdentarios, que facilitan su formación, ya que se dan condiciones especiales que favorecen la proliferación microbiana y la instalación de caries y enfermedades periodontales”, advierte.
La periodoncista comenta que la lengua, debido a su morfología, retiene abundantes microorganismos y detritus. Por ello, es importante limpiarla con un elemento especialmente diseñado para la higiene lingual o con el mismo cepillo de dientes.
“Si el problema persiste, es recomendable consultar al médico para descartar posibles causas sistémicas”, finaliza.
No lo olvides: cepilla tus dientes después de cada comida y utiliza seda dental y enjuagatorios bucales, para evitar o solucionar el mal aliento.