El procedimiento de la toma de presión arterial se ve sencillo cuando está a cargo una enfermera o profesional de salud, pero cuando es uno mismo quien se lo realiza, puede resultar más complejo.
Solo en algunos casos, el médico puede indicar la toma de presión arterial domiciliaria; por ejemplo, cuando el paciente requiere tener un registro diario de este indicador. “Ante pacientes que tengan enfermedades cardiovasculares como hipertensión arterial, con antecedentes de infartos, accidente cerebrovascular, y cuadros clínicos como dolor de cabeza intenso que no cede, mareos, palidez o sudoración frente a una causa desconocida, el médico tratante puede indicar este procedimiento en casa”, afirma Guillermo Serrano, enfermero de la Universidad Diego Portales.
Los dispositivos disponibles en el comercio para la toma de presión arterial domiciliaria se denominan tensiómetros. Son equipos digitales que varían según la zona del cuerpo en que deben ser instalados para el monitoreo. Son automáticos y de fácil uso, con botón de inicio y pantalla digital que entrega los valores de la presión sistólica, presión diastólica y frecuencia cardíaca. En general, el sistema cardiovascular mantiene dos presiones: una presión alta o sistólica, que es cuando el corazón está eyectando la sangre, y una presión al final del ciclo cardíaco, denominada diastólica o presión baja. La presión alta debiera ser a todo evento menor a 130 milímetros de mercurio; y la presión baja, menos de 80 milímetros de mercurio.
Preferir los de brazo
“Hay dispositivos de medición de presión arterial diseñados para ser colocados en el brazo o en la muñeca, siendo preferibles los primeros. En ellos solo se debe colocar el manguito (brazalete) sobre la extremidad y oprimir el botón de inicio. Los más indicados y recomendados son aquellos tensiómetros que se encuentran validados (certificados) en cuanto a la exactitud y presión”, explica Guillermo Serrano.
Tips para un registro exacto
“Hay diversas situaciones que pueden influir en el valor de la presión arterial que
debemos conocer para lograr medirla con exactitud”, advierte el enfermero de la UDP. Por ello, sugiere las siguientes medidas para un registro exacto en el procedimiento de instalar el dispositivo en el brazo, apretar el botón de inicio y esperar a que la máquina se accione e indique los valores de la presión arterial.
Realizar el procedimiento en un lugar tranquilo, en lo posible libre de ruidos.
Previo al monitoreo, evitar el cigarro y tabaco, consumo de café, haber realizado actividad física reciente y toda distracción o necesidad que pueda inquietar. “Incluso, tener ganas de orinar nos puede alterar los valores de la presión arterial.
“Bajo este contexto, cada persona puede decidir el momento en que estos puntos básicos puedan cumplirse. Una recomendación puede ser realizar la medición en la mañana, al despertarse”, aconseja.
Para utilizar el tensiómetro debemos considerar que el manguito o brazalete que rodea nuestro brazo debe ser acorde a nuestro tamaño. “Uno muy grande o muy pequeño pueden arrojar cifras erróneas”, dice el enfermero.
Respecto de la posición corporal durante la toma de presión, lo indicado es estar sentados, con la espalda bien apoyada al respaldo de la silla, con ambos pies en el suelo sin cruzarlos. “El brazo en el cual tomamos la presión debe estar a la altura o alineado al corazón, apoyado en la mesa, y el manguito tiene que estar en contacto directo con nuestro brazo. Se debe estar tranquilo, sin conversar durante el momento de la medición”, detalla.
Cuando acudir a una Urgencia
Un registro de presión arterial muy excedido por sobre los valores normales (presión sistólica entre los 90 a 130 mmHg. y presión diastólica entre 60 a 80 mmHg.), puede implicar un severo riesgo para la salud. En esa eventualidad, se debe acudir de inmediato al Servicio de Urgencia más próximo al domicilio.
“Frente a una emergencia hipertensiva en los cuales los valores de presión arterial sistólica sea igual o mayor a 180 mmHg (el primer valor que aparece en el tensiómetro) y/o la presión arterial diastólica (el segundo valor que aparece en el tensiómetro) sea igual o mayor a 110 mmHg, son cifras que deben alertarnos y tener que acudir inmediatamente a un Servicio de Urgencia, ya que indica que puede haber daño en nuestros órganos y que debe ser manejado inmediatamente”, alerta Guillermo Serrano.
Recuerda que personas hipertensas o con antecedentes de infarto, entre otras, tienen indicación médica de toma de presión en casa. Durante el procedimiento se debe estar sentado, tranquilo y en silencio.