Alrededor de 340 calorías puede tener una porción regular de pastel de choclo, lo cual representa, en algunos casos, casi un cuarto de las calorías que la Organización Mundial de la Salud, OMS, recomienda consumir al día: entre 1.500 a 2.000 kcal en el caso de las mujeres y 2.000/2.500, los hombres.
Una de las formas de disminuir el aporte calórico de este plato es reemplazando las carnes por champiñones y evitar adicionar azúcar una vez servida la preparación. Mauricio Ríos, nutricionista y docente de la Pontificia Universidad Católica de Chile, comenta que, entre las propiedades de estos hongos comestibles, destaca su poder antioxidante gracias a su alto contenido de selenio, que ayuda a destruir los radicales libres que dañan las células. Además, los champiñones son ricos en fibra, fortalecen el sistema inmune, son bajos en calorías y aportan vitaminas A, B1, B2, B3, B5, B9, Vitamina C y Vitamina E.
Por su parte, el choclo, maíz o elote -como se denomina en distintos países de América Latina al protagonista de esta preparación- también es rico en fibras y aporta fósforo, que nos ayuda en el proceso de reparación de células y tejidos. Como es un carbohidrato, también nos entrega energía. Un pocillo de greda de 11 cm con pastel de choclo puede aportar alrededor de 50 grs. de hidratos de carbono.
Ahora que ya sabes cuáles son las propiedades del choclo y de los champiñones, ponte el delantal y ¡manos a la obra!
Ingredientes:
6 unidades de Choclo fresco o 2 tarros de maíz desgranado
1 rama de Albahaca
1/3 taza de leche descremada
1 cebolla
500 gramos de champiñones
3 huevos duros
Aceitunas
Sal, orégano, comino y pimienta
Preparación:
Pica la cebolla en cuadritos muy pequeños y sofríela, una vez que tome un color medio amarillento, agrega los champiñones ya picados y limpios. Sazona con sal, pimienta y muy poco comino.
Cuece los huevos y cuando estén listos, córtalos por la mitad.
Desgrana los choclos, tratando de eliminar los pelos. Mételo en la juguera junto con la albahaca (ya lavada), la leche, agrega sal, pimienta y comino, y licúa hasta obtener una pasta espesa. Vierte la pasta en una olla con un poco de aceite de oliva y cocina unos minutos, revolviendo de vez en cuando. Si está demasiado espesa, puedes agregar un poco de leche, pero no mucha ya que no debe quedar muy acuosa.
En un recipiente para el horno coloca el sofrito de champiñones con cebolla, luego los huevos cortados por la mitad y las aceitunas. Cubre estos ingredientes con la pasta de choclo, también llamada pastelera. Llévalo a un horno medio por aproximadamente 30 minutos.
¡Sorprenderás a todos con esta nueva versión de pastel de choclo!