¿Dieta baja en Fodmap? Sí, la que cuida tu salud gastrointestinal
Disminuir los síntomas gastrointestinales como dolor abdominal y estreñimiento, meteorismo, flatulencia, gases, dolor abdominal, diarrea y constipación, es el objetivo de la dieta baja en Fodmap, desarrollada en Australia y que desde hace poco tiempo es considerada en Chile como parte del tratamiento para aliviar este tipo de síntomas.
Fermentación e inflamación
En simple, la dieta baja en Fodmap (sigla del inglés para oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables) restringe alimentos que contienen fibra fermentable y que tienen una deficiente absorción intestinal, produciendo exceso de agua y gases.
El objetivo de este plan de alimentación es justamente disminuir estos síntomas, por lo tanto, es considerada en el tratamiento para el colon irritable y manejo de otras patologías como sobrecrecimiento bacteriano intestinal, enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa.
“Los Fodmaps al ser azúcares que no se absorben completamente a nivel del intestino, se mueven lentamente a través de él, movilizando agua. Luego llegan al colon, donde son fermentadas por bacterias produciendo gas. El exceso de gas y de agua expanden la pared del intestino, generando dolor y molestias”, explica la Dra. Sabrina Wigodski, médico nutrióloga formada en la Universidad de Los Andes y Universidad de Chile.
Alimentos restringidos y sustitutos
Estos son algunos de los alimentos que se deben limitar según esta dieta:
- Lácteos
- Miel
- Trigo
- Porotos
- Lentejas
- Alcachofa
- Espárragos
- Cebolla
- Ajo
- Frutas: manzana, cerezas, pera y durazno.
Para sustituirlos, el nutricionista o nutriólogo que indica esta dieta considera alimentos como pollo, pavo, carne, pescado, huevo, semillas de zapallo, linaza, arvejas, garbanzos, tomate, pepino, zanahoria, arándanos, plátano y naranja, además de granos como arroz y trigo sarraceno.
Restrictiva, pero transitoria
La Dra. Wigodski comenta que, si bien esta dieta limita bastante la lista de alimentos, es un plan alimenticio transitorio. “Primero se evitan todos los alimentos altos en Fodmaps, luego se van reintroduciendo de a poco, viendo cómo es la tolerancia a cada uno de ellos por separado”, precisa la profesional.
Una vez que la persona vuelve de manera paulatina a consumir alimentos altos en Fodmap y puede tolerar algunos, el profesional responsable de la dieta evalúa cuáles de estos alimentos mantener y cuáles seguir restringiendo. “En la medida en que se toleren bien, se mantienen dentro de la alimentación. La idea es saber qué alimentos no se toleran bien para eliminarlas de la dieta o intentar consumirlas en bajas cantidades y sólo de a uno por día”, concluye la Dra. Sabrina Wigodski.
Recuerda que la dieta baja en Fodmap se utiliza para aliviar síntomas de trastornos gastrointestinales y se basa en la restricción de alimentos que contienen fibra fermentable, como cebolla, manzana o porotos, entre otros.
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