Sin duda, las pestañas y cejas son el marco de la cara y qué mujer alguna vez no se las ha encrespado o pintado para que se vean aún más largas, otorgando muchas veces una mirada más profunda y con carácter. Pero más allá de un asunto estético, las pestañas cumplen una función fisiológica importante, ya que impiden que entren partículas nocivas, pelusas u objetos volátiles que puedan dañar el globo ocular o entorpecer la vista.
Sin embargo, así como se cae el pelo y los vellos del cuerpo, también se caen las pestañas. Y aunque en ocasiones puede ser causa de alguna patología, la mayoría de las veces se trata de una pérdida natural cíclica. Se estima que en un año se pueden llegar a caer cerca de 100 pelos de pestañas y su crecimiento puede tardar entre 6 a 8 semanas.
El Dr. Rodrigo de la Parra, dermatólogo y profesor adjunto de la Universidad de Chile señala que las principales causas de pérdida de pestañas son:
El dermatólogo indica que los más propensos a sufrir la caída de pestañas son las personas con un estrés alto, con enfermedades autoinmunes y aquellas que están en tratamiento de quimioterapias para el cáncer. “Las mujeres que usan muchos cosméticos en los ojos, también pueden verse afectadas”, aclara.
¿Cómo evitar la caída?
Ya sabes, para unas pestañas sanas y que luzcan perfectas, evita productos que puedan irritarlas. Y procura, además, mantener una estricta higiene diaria, es decir, retira todo el maquillaje con limpiadores especiales para ojos.