Curcumina: un antiinflamatorio natural
Muchas son las teorías que intentan explicar el envejecimiento humano y una de ellas es la teoría de los radicales libres, que eventualmente se acumulan y dañan el ADN de nuestras células, provocando lesiones degenerativas y muerte celular, con el posterior envejecimiento del organismo. Y si bien la esperanza de vida de una especie está determinada genéticamente, puede verse modificada por condiciones ambientales, tales como la dieta.
Es cuando entonces cobra gran relevancia la curcumina; este pigmento amarillo que se encuentra en la raíz de la cúrcuma, que está presente en una concentración que alcanza hasta el 5% y que se utiliza comúnmente como condimento y colorante en la industria alimentaria.
La curcumina podría estar precisamente retrasando el envejecimiento de las personas gracias a sus propiedades antioxidantes. También se ha observado un notable efecto antiinflamatorio que puede ocurrir por su capacidad para inhibir importantes enzimas que intervienen en los procesos inflamatorios. Recordemos que un alza inadecuada de estas enzimas se ha asociado con el desarrollo de ciertos tipos de cáncer humano, así como con trastornos inflamatorios. Debido a que la inflamación está estrechamente relacionada con la promoción de tumores, se prevé que la potente propiedad antiinflamatoria de la curcumina podría ejercer efectos quimiopreventivos sobre los procesos cancerígenos.
La curcumina es un gran aliado para la salud de las personas, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
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