Desde su aparición en los años 60, los anticonceptivos orales se instalaron como el método más usado a nivel mundial para la planificación de un hijo.
Las píldoras anticonceptivas combinadas -más conocidas como la píldora-, contienen un estrógeno y un progestágeno (progesterona sintética); y a pesar de su uso masivo, hasta la fecha existen una serie de mitos con respecto a sus efectos en el organismo.
La Dra. Andrea Schilling, ginecóloga infanto-juvenil e investigadora de Clínica Alemana, aclara qué es verdad y qué es mito sobre los anticonceptivos orales.
Las pastillas anticonceptivas engordan: Mito. “No existe ninguna evidencia de que los anticonceptivos orales y los métodos hormonales, en general, engorden. De hecho, hay estudios poblacionales a largo plazo que han seguido a mujeres por décadas, entre los 19 a 45 años, y han concluido
que suben 450 grs por año; y eso es exactamente igual para mujeres que toman la píldora como las que no lo hacen. Existen algunos métodos muy específicos, como los implantes y algunos inyectables que pueden hacer subir 1 o 2 kilos. Sin embargo, si se toman las precauciones con un estilo de vida sano, es perfectamente posible de manejar”, asegura la Dra. Schilling.
Cualquier pastilla anticonceptiva sirve: Depende. “Desde el punto de vista anticonceptivo, en general, es cierto que cualquier pastilla anticonceptiva le sirve a cualquier mujer. Sin embargo, hay píldoras que tienen algunos efectos benéficos agregados, ya sea para mejorar el acné, disminuir los vellos o retener menos líquido. Entonces, aparte de su uso como anticonceptivo, algunas tienen efectos estéticos. Por tanto, estos beneficios no anticonceptivos deben tomarse en cuenta a la hora de prescribirla o de tomarla”,
Si se toma por mucho tiempo, produce infertilidad. “Las pastillas están en el mercado hace más de 60 años y está absolutamente demostrado que no producen infertilidad. Es cierto que en estos tiempos hay cada vez más parejas infértiles, pero eso no tiene que ver con las pastillas, sino con la edad. A mayor edad, la especie humana tiene menor fertilidad, y las mujeres en la actualidad están postergando su embarazo para los 35 o más años. Y, después de los 38, se produce una reducción muy importante en la fertilidad”, sostiene.
No debe combinarse con tabaco: Verdadero. “Idealmente las pastillas anticonceptivas no debieran combinarse con tabaco, sobre todo, mujeres mayores de 35 años. Esto porque, a mayor edad, mayor el riesgo de una trombosis venosa profunda, que son los coágulos en las piernas, que pueden ir al pulmón y generar una embolia pulmonar. Los principales factores de riesgo es la edad, la obesidad y el tabaco, y si se suman dos factores como el tabaco y la edad, más los anticonceptivos, el riesgo es mucho mayor. Las mujeres fumadoras mayores de 35 años no deben usar pastillas anticonceptivas combinadas, es decir, aquellas que tienen estrógenos y progestágenos. Sí pueden usar aquellas píldoras con progestágeno solo, como las que se usan en la lactancia”, señala.
Las pastillas orales son menos eficaces que otros métodos anticonceptivos: Depende. “Todos los métodos bien utilizados son igual de eficaces. Las pastillas bien tomadas y sin olvidos, son tan eficaces como un dispositivo intrauterino, un implante bajo el brazo, etc. El método es igual de bueno; ocurre que, a veces, a la usuaria se le olvida tomar la pastilla, por lo que el método deja de ser tan bueno. En ese sentido, hay que tener cuidado: no todos los métodos son para todas las mujeres. Las pastillas anticonceptivas que se debe tomar todos los días, a la misma hora, no son una buena alternativa para las personas más olvidadizas”, aconseja.
Ya sabes entonces, aclara tus dudas sobre qué es mito y qué es verdad sobre las pastillas orales, y decide cuál es el método anticonceptivo más apto para ti.