Un golpe en la nariz, sonarse de manera vigorosa o viajar a lugares de altitud elevada son situaciones que en más de una ocasión pueden haber provocado sangrado de la nariz.
Dicha hemorragia se denomina epistaxis. “Corresponde a la salida de sangre desde las fosas nasales debido a una lesión del tejido de la nariz, rico en vasos sanguíneos”, señala el Dr. Claudio Callejas, otorrinolaringólogo de Red de Salud UC Christus. Se estima que un 60% de la población tendrá algún sangrado nasal en la vida. “Afortunadamente la mayoría de los sangrados nasales no son graves”, indica el especialista.
La mayoría de las veces el sangrado se produce desde la porción anterior del tabique nasal, en cuyo caso habitualmente cede en forma espontánea o con compresión del vestíbulo nasal, que corresponde a la zona blanda de la nariz. Con menos frecuencia, se produce en la región posterior de ésta, cuando la sangre cae desde esa zona de la nariz hacia la boca. “Estos últimos suelen ser de mayor cuantía y requieren de atención médica de urgencia”, advierte el Dr. Callejas.
Hemorragia que no es normal
Otra de las causas frecuentes que suele predisponer el sangrado de nariz es la sequedad de la mucosa nasal. “Tras una evaluación por el especialista que descarte causas de sangrado que requieran algún tratamiento específico, mantener una lubricación nasal adecuada con indicación médica puede disminuir el riesgo de sangrado. Es importante mencionar que se debe evitar el uso de ungüentos antibióticos para la lubricación nasal regular, ya que estos pueden favorecer la colonización nasal con bacterias resistentes a los antibióticos”, explica el Dr. Claudio Callejas.
Cualquiera sea el tipo de sangrado nasal, nunca es normal. Así lo asegura el profesional. “Puede ser provocado por factores como golpe nasal, sonarse muy fuerte, sequedad de la mucosa nasal, pero nunca es normal. Habitualmente, el sangrado nasal es autolimitado y no tiene mayores consecuencias, pero en algunas ocasiones puede ser la manifestación de una enfermedad grave”. Entre ellas, alteraciones de coagulación, tumores benignos o malignos.
¿Cuándo consultar al médico?
¿Qué hacer para detener la hemorragia?
Recuerda que el sangrado nasal en la mayoría de los casos no es grave y se puede detener al apretar por 5 minutos las fosas nasales con los dedos índice y pulgar. Ante hemorragia nasal recurrente o que no se detiene al realizar esta maniobra, se debe acudir al médico.