Con los años, las personas mayores comienzan a perder de manera progresiva y generalizada masa muscular esquelética, pero cuando este declive normal sobrepasa límites establecidos ocurre lo que se conoce como sarcopenia, que implica también una disminución de fuerza y un descenso en el rendimiento físico como, por ejemplo, la capacidad para acelerar el paso al caminar, subir escaleras, levantarse de una silla, entre otros.
“Desde los 30 años se empieza a perder entre un 3 y 8 por ciento de la masa muscular por cada década de vida”, advierte Fernanda Aleitte, kinesióloga de geriatría del hospital de la Universidad de Chile, y docente de las universidades de Chile y Santiago.
La especialista indica que las causas de esta pérdida de masa muscular son multifactoriales, sin embargo, se pueden identificar dos grandes grupos:
La kinesióloga afirma que la pérdida de masa muscular se manifiesta inicialmente en las actividades cotidianas que requieren de mayor esfuerzo; por la presencia de mayor cansancio en el desarrollo de estas tareas y una disminución de los perímetros musculares, entre otros. “La disminución del tríceps de la pantorrilla es uno de los principales grupos musculares que evidencia la presencia de sarcopenia”, señala la docente, quien advierte que la reducción o pérdida de músculos aumentan el riesgo de caídas, fracturas, pérdida de funcionalidad y de independencia, discapacidad física, reducción de la calidad de vida y mortalidad.
¿Se puede recuperar la masa muscular?
Si bien este declive es fisiológico y todos nos vemos expuestos a que ocurra, la kinesióloga asegura que podemos modificar la pendiente, ya que el músculo nunca pierde la capacidad de crecer. “La generación y degradación muscular son dos procesos que ocurren paralelamente a lo largo de la vida y mantienen un cierto equilibrio. La edad y otros factores hacen que prevalezca la degradación muscular por sobre la formación de músculo, sin embargo, si estimulamos aquellos factores que favorecen la generación de masa muscular, podemos recuperar lo perdido”, asegura.
Consejos para recuperar la masa muscular
Nunca es tarde para ejercitarse, nuestro cuerpo no pierde su capacidad de aprender y adaptarse a las demandas del entorno. El entrenamiento es clave para mantenernos funcionalmente activos.